miércoles, 22 de mayo de 2013

¿QUÉ ES ESO DEL PARTO RESPETADO?

Llega la SEMANA MUNDIAL POR EL PARTO RESPETADO.
Un año más.
Todas las asociaciones y organizaciones del "mundillo maternal" se lanzan a promocionar actividades y eventos de promoción, de concienciación y de reivindicación. La cosa se agita y todo el mundo se mueve en estos días. Charlas, encuentros, proyecciones, mesas redondas... El movimiento y la agitación se contagian, se me contagian, y yo también me lanzo a promover, a concienciar y a reivindicar. Yo también quiero organizar "algo", lo que sea!
Pero...
Pero resulta que aquí, aquí donde me encuentro, en este lugar concreto, en este pueblito remoto, el concepto de PARTO RESPETADO no es algo que aparezca normalmente en las conversaciones de la gente. Las madres y las mujeres que pronto van a serlo no hablan de ello, no piensan en ello, no saben lo que es y tampoco se plantean el saberlo. Tengo los carteles del evento preparados, pero no los he pegado por el pueblo porque sé que no va a acudir nadie. Es así de simple.
Aquí, aquí donde me encuentro, en este lugar concreto, en este pueblito remoto, hay un trabajo más importante que hacer. Un trabajo previo a la promoción, la concienciación y la reivindicación: Aquí, toca INFORMAR. Toca, lo primero y principal, lo más básico, hacer entender a las mujeres que existe otra forma de parir diferente a la que conocen y creen única; que existe una forma más respetuosa y más sana de entender y vivir el parto, y que a eso llamamos de esa manera. PARTO RESPETADO.
¿Qué demonios es eso del Parto Respetado????
Este entrada al blog va a ser mi particular evento, mi particular colaboración. Va dirigido de corazón a las madres de este pueblito remoto, madres que nunca se han preocupado ni interesado por este tema, que nunca antes han prestado atención a dicha expresión. Veamos...
Dicho de manera muy simple:

- Un Parto Respetado es aquél en el que la madre y su bebé son protagonistas absolutas del mismo. Y al hablar de protagonistas no me refiero (no solo...) a que todo el mundo esté pendiente de ellas, mimándolas, cuidándolas y girando a su alrededor; me refiero a que en la escena del parto ellas son las que deciden cómo son las cosas. El resto del mundo en realidad no gira en torno a ellas: Las sigue un paso por detrás. En realidad, más que protagonistas, son las directoras. Las jefas. Las que tienen el control. 

- Un Parto Respetado, por lo tanto, es aquél en el que la madre, para poder tomar las decisiones pertinentes, está rigurosa y exquisitamente informada acerca del parto, de su parto, de su situación y sus opciones. ¿A quién corresponde esta labor de informar a la madre? ¿Quién es el/la encargado/a de dotar a las madres de este poder? La profesión médica que las atiende, sin duda. A los médicos, ginecólogos etc. les toca ceder el poder de decisión, que legítimamente pertenece a las madres, y sustituirlo por un ejercicio para el que a veces están muy poco entrenados: El del RESPETO. Informar, respetar y servir a las madres. No ocultar, no decidir, no asustar, no forzar, no manipular. 

- Un Parto Respetado, según estamos viendo, es aquél en el que la profesión médica no hace uso y abuso de sus competencias para obligar a la mujer a hacer las cosas de una manera determinada. A su manera. a la manera que, por la razón que sea (comodidad, tradición, protocolo...) más le conviene. Es aquél en el que los profesionales lo cuentan todo, lo comparten todo, bajan del pedestal de la bata blanca y se vuelven humanos de nuevo. ¿Qué significa volverse humanos?Volverse humanos significa tratar a las mujeres de parto como a iguales. RESPETARLAS. No ningunearlas. No convertirlas en objetos sin voluntad, ni en niñas sin criterio. No convertir sus partos en "algo a solucionar". Dejar a las mujeres parir y estar ahí por si, en un momento dado, la mujer que está pariendo los necesita. Aceptar que a veces, muchas veces, la mayor parte de las veces, no serán apenas necesarios...

- Así, un Parto Respetado es aquél que, si transcurre de manera normal, no se considera una urgencia médica sino un acontecimiento fisiológico, natural, familiar, humano. En un acontecimiento de este tipo un médico no toma decisiones sino que acompaña a la mujer en las que ella misma toma; Un acontecimiento de este tipo no se fuerza, no se apresura, tiene su propio ritmo y su cadencia propia, discurre mejor en la intimidad, en la penumbra, en el calor y el silencio... Un médico que lo sabe protege este ritmo, esta cadencia, esta intimidad, este clima... Eso es respetar el parto.

- Y por supuesto, sobra decirlo, un Parto Respetado es aquél en el que nadie hace nada que pueda dañar de la manera que sea a la madre o a su bebé. Cesáreas que no vienen a cuento, episiotomías innecesarias, Kristellers espeluznantes... o, volvemos al principio, goteros sin explicación, epidurales desinformadas, lactancias mal atendidas, monitores malinterpretados, malas caras, presiones, mentiras o verdades a medias... Todo esto son agresiones a las mujeres de parto. Algunas cicatrices que quedan tras el parto, ya sean en el alma o en el cuerpo, no son signos de respeto sino, de verdad, de maltrato.

... ¿Se va entendiendo?...

- Un Parto Respetado, también, es aquél que el entorno cercano e incluso la sociedad en su conjunto (los medios de comunicación y las abuelas, la vecina del quinto y el gestor del hospital de turno...) no contamina con miedos y leyendas truculentas varias. Es aquél que no se presupone un peligro, una agonía y un insoportable dolor sino un momento de gozo, de vida, de ilusión...

- Un Parto Respetado, por último, es aquél en el que la mujer siente que HA PARIDO. Que, de la manera que haya sido, con epidural o sin ella, mediante cesárea si así ha sido preciso, en su casa o en una clínica privada, a cuatro patas o tumbada, como sea... el parto ha sido asunto suyo. Ella lo ha hecho. 

A esto nos referimos cuando hablamos de PARTO RESPETADO. 
De esto estamos hablando.
¡Ojalá seamos cada vez más las que hablemos de ello! En este pueblito remoto, y en todos los demás...